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Puerto San Rafael Valdelinares

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Bajada del Puerto de San Rafael 1

Bajada del Puerto de San Rafael 2

Puerto San Rafael Valdelinares

Descripción: Nos vamos a enfrentar al puerto más exigente de la provincia turolense, que nos va a suponer un esfuerzo continuado de más de dos horas y en el que deberemos vencer dos puertos encadenados: el de San Rafael y el de la estación de esquí que lleva el nombre del pueblo; Valdelinares, que se halla en la otra vertiente. Estamos en lo más alto de la Sierra de Gúdar y de toda la provincia. En la bella e histórica localidad de Mora de Rubielos damos inicio a una larga ascensión de más de 13 kms. hasta el Puerto de San Rafael, primer plato del menú de la jornada. Esta primera ascensión se puede dividir en varios tramos de dureza alternante, el primero de los cuales nos sirve de aperitivo para los platos fuertes del día. No superamos en él el 4% durante esos cuatro primeros kilómetros. Luego nos enfrentaremos a una zona de mayor dificultad en los siguientes tres mil metros en los que la pendiente se sitúa entre el 6 y el 7% con alguna rampa del 10%, en los que iremos trazando varios zig-zag hasta alcanzar el Mirador y la Fuente del Hortalán. En este punto se inicia el pinar que no nos abandonará hasta la cima de este primer alto. Los próximos tres kilómetros van a suponer un suficiente reposo a nuestras piernas que deberemos aprovechar antes de vencer los últimos casi tres mil metros, con nuevas rampas, que dan comienzo en el Barranco del Arco y la fuente conocida como Cascada de la Hiedra y que finalizan, de momento, en lo alto del Puerto de San Rafael a 1560 m. de altitud. Como vemos, hemos ido sumando tramos de tres kilómetros en los que se han alternado la dificultad y el reposo. Nos toca ahora descender hasta el cruce hacia la Estación atravesando el núcleo turístico, repleto de bares, restaurantes y diversas urbanizaciones de chalets que rodean al Santuario de la Virgen de la Vega. Han sido, de nuevo, algo más de tres kilómetros que nos habrán servido para dar descanso a nuestras piernas y prepararlas para el duro esfuerzo al que deberán enfrentarse en la subida final a la estación de esquí de Valdelinares. Vamos a ir abandonando en trazado rectilíneo la vega de la Virgen citada y de Alcalá de la Selva, sin realizar todavía ningún esfuerzo exigente, hasta que las cosas se compliquen ya en grado suficientemente serio como para dar a esta subida la consideración de categoría especial, unida como está a la del puerto de San Rafael anterior. Tras dos primeros kilómetros que no alcanzan el 4% de pendiente media trazaremos una herradura derecha e inmediatamente una rampa al 10% nos dará la primera idea de lo que aún nos aguarda hasta alcanzar la Estación Invernal. Este tramo, sin sombras y que traza varias herraduras -aunque también tiene una larga recta de 1 km de longitud- se mantiene en una pendiente media del 7,5% hasta llegar a un tramo más suave de mil metros por debajo del 5%, justo después de haber vencido una rampa del 12% y dando así paso a una zona de pinares que nos acompañarán en los siguientes kilómetros. Desde este punto nos enfrentaremos a la parte más dura de toda la subida que parece querer extraer de nosotros las fuerzas que nos resten en esta zona final cercana al 9% y con varias rampas de dos cifras en su porcentaje. Al alcanzar el collado sólo nos quedará un tramo final de mil metros muy llevaderos hasta llegar a la estación de Valdelinares en la que podremos pasearnos por todas sus instalaciones, evitando en lo posible a los innumerables vehículos que pueblan la zona en los fines de semana. Estaremos a pocos metros de la cumbre del Peñarroya ya que esta ascensión nos sitúa prácticamente en los 2000 m. de altitud. Estamos a un paso del cielo.